Martin Scorsese
Nacido en Nueva York y en plena segunda guerra mundial encontramos a Martin Scorsese. Un director, productor y guionista que sin lugar a dudas se ha convertido en uno de los mejores realizadores de la historia del cine.
Al igual que el resto de los directores que ayudaron en esa transición hacía “El nuevo Hollywood”, Martin aportó su visión cinematográfica. Una mirada y un estilo muy característicos que se podrían dividir en una serie de parámetros.
En primer lugar, las temáticas. Scorsese siempre ha partido de las calles, los sujetos y los personajes que se movían en ambientes italoamericanos. Una cultura que le daba acceso a un tipo de trama muy concreta, la cual se movía entre el thriller y la mafia. Dos temas que al margen de alguna excepción, siempre han estado presentes en sus películas.
Malas calles (1973) fue la primera película que determinó estos rasgos y mediante la cual consiguió ganarse un puesto entre los directores que reflejaban la novedad en el nuevo Hollywood. Sin embargo, no todo fueron una lluvia de flores para el director, pues había otros rasgos del mismo que causaron numerosas polémicas en la industria. Su lenguaje subido de tono y vulgar y el excesivo abuso de violencia eran dos incógnitas imprescindibles en su películas, pero que desgraciadamente en alguna ocasión provocaron muy bajos números en las salas de cine como en Goodfellas (1990).
Hasta la fecha ha sabido alejarse de tramas en diversas ocasiones como en el Lobo de Wall Street (2015), en la cual adaptó la historia real de Jordan Belfort, Silencio (2018) o su próximo filme Killers of the flower moon.